El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Linares (Jaén) ha condenado al BBVA a indemnizar con 3.000 euros a un joven cliente que tenía contratada una tarjeta ‘revoliving’, a quien metió indebidamente en la Central de Información de Riesgos del Banco de España (CIRBE) y en ficheros de morosos. Y las inscripciones se realizaron <<sin precio requerimiento de pago, sin notificación previa >> y sin tener en consideración que había presentado una demanda contra la relación contractual de la que derivaba el crédito, instando su nulidad, por usura, segín se desprende de la sentencia.
<<Lo importante de esa sentencia es que pese a que el Tribunal Supremo está poniendo muy difícil poder reclamar por estas inscripciones cuando se trata de tarjetas ‘revolving’, aún se puede>>, declara el abogado del demandante, Daniel Sánchez Bernal, letrado sevillano conocido por su lucha contra la justicia tardía.
Además, señala que <<esta sentencia es interesante porque todavía hay quienes no demanda por la inclusión en la CIRBE, ya que, en puridad, no es un fichero de morosos al uso como el Asnef o Equifaz >>, y hace un llamamiento <<a no quedarse quieto ante estas injusticias>>.
El magistrado-juez Javier Antonaya Tendero, titular del Juzgado ha concluido en su sentencia que el banco ha cometido una intromisión ilegítima en el derecho al honor del demandante por incluirlo y mantener sus datos registrados en los ficheros de Asnef-Equifax desde febrero de 2019 a julio de 2021 y en el fichero de la CIRBE desde fecha indeterminada, y le impone esta pena por los daños morales ocasionados, además de las costas